Botellas de la calma

¿Que son las botellas de la calma?

Las botellas de la calma pueden tener diversos nombres como por ejemplo, botellas relajantes, botellas antiestrés o frascos de purpurina.

El material más importante que se emplea para la fabricación de las botellas de la calma es purpurina, pero también se pueden utilizar otros componentes como pueden ser pegamento, glicerina o agua, entre otros. El resultado final es una botella llena de líquido de colores, con purpurina.

Este tipo de frascos son un recurso muy válido para ayudan a calmar a los niños en momentos difíciles de estrés o nerviosismo. Lo que se hace es agitar la botella y durante unos minutos se mueve el material que lleva dentro creando una corriente de purpurina y color. Con el fin de que los niños se relajen mientras miran el movimiento de la purpurina dentro del frasco.

Cómo hacer un frasco de la calma o bote mágico para los niños de forma casera (paso a paso)

Realizar manualmente una botella de la calma es bastante económico y además muy sencillo. A continuación te muestro los pasos a seguir, ahí vamos:

  1. Vierte agua templada o caliente en un bote de cristal o en una botella de plástico indistintamente. Si el niño es muy pequeño por seguridad es recomendable la botella de plástico.
  2. A continuación hay que añadir dos cucharadas soperas de pegamento y removerlo bien en el agua. Cuanto más pegamento se añada al agua más va a tardar en descender la purpurina, por lo tanto tendrá un efecto más relajante si cabe.
  3. Llega el momento de añadir la purpurina. Se agregan 3 o 4 cucharaditas de purpurina a la mezcla del color que más le guste a tu hijo. Seguidamente se remueve todo para que se mezcle bien la purpurina, el agua y el pegamento.
  4. Seguidamente hay que añadir unas gotas de colorante al agua del color que más le guste al niño y remover la mezcla nuevamente.
  5. Finalmente se coloca la tapa y se cierra con fuerza la botella para que la mezcla no se salga y ya está lista para utilizar.